A partir del próximo 24 de septiembre de 2020, entran en vigor las modificaciones del Código Técnico de la Edificación, aprobadas mediante el Real Decreto 732/2019, de 20 de diciembre.
¿Cómo afectan dichas modificaciones al diseño y construcción de tu vivienda?
Las modificaciones más importantes que se incorporan en esta última versión del Código Técnico de la Edificación respecto de sus versiones anteriores se engloban en el Ahorro de Energía y la Protección frente a la exposición al Radón.
Las mayores modificaciones se encuentra en el Documento de Ahorro de energía. Se limita al máximo el consumo de energía primaria no renovable y el aislamiento térmico que deben ofrecer cerramientos y ventanas es mucho más estricto.
Respecto del último concepto, en función del municipio y de los datos de exposición al radón, las medidas de protección varían, debiendo colocar barreras de protección o cámaras de aire que protejan los espacios vivideros frente a la sobreexposición a este gas.
¿Si quiero rehabilitar una vivienda también me afecta el Código Técnico de la Edificación?
Si, si se sustituyen las instalaciones térmicas de la vivienda y edificio, y/o si se actúa sobre un porcentaje mayor del 25% de la envolvente del mismo.
Sin embargo, su cumplimiento es más flexible. No deben cumplirse unas exigencias tan extrictas como las que se aplican para viviendas de nueva construcción.
¿Qué consecuencias tiene todo esto en el diseño de una vivienda y en la inversión que supone su construcción?
La consecuencia final de la aplicación de esta nueva normativa es conseguir que las nuevas viviendas sean sostenibles, es decir, que el gasto de energías no renovables se minimice, potenciando las energías renovables de manera generalizada.
¿Lo más destacable?
- Mayor inversión inicial en las instalaciones térmicas del edificio
Sin embargo, y gracias a los rendimientos y características de los sistemas renovables de producción de ACS y Calefacción, las facturas de los suministros caen exponencialmente, lo que permite rentabilizar en muy poco tiempo la inversión en energía renovable frente a los sistemas convencionales.
- Mayor calidad de carpinterías y cerramientos
La envolvente térmica que protege los espacios vivideros de la vivienda deben cumplir unas altas prestaciones en cuanto a aislamiento térmico, buscando la hermeticidad.
Además, para minimizar las pérdidas de calor por los puntos más débiles de la envolvente, las ventanas tendrán vidrios bajo emisivos, dobles e incluso triples, con carpinterías de altas prestaciones térmicas.
- Mayor exigencia en el control del proceso constructivo
De esta forma, con un correcto método constructivo, se consigue minimizar las pérdidas de calor en puntos críticos de la envolvente, como son los frentes de forjados, perímetro de ventanas, y puntos de contacto de cerramientos verticales y horizontales, es decir, fachadas y cubiertas.
- La instalación de ventilación mecánica es obligatoria
Si bien hasta ahora, la instalación de un sistema de ventilación mecánica, aunque recomendable, no era obligatorio, a partir del próximo 24 de septiembre todas las viviendas de nueva construcción deberán, obligatoriamente, disponer de ventilación mecánica.
¿Ventajas?
Se asegura un aire de calidad óptima y una correcta ventilación todo el tiempo, sin tener que depender de la ventilación manual, tanto si la vivienda está ocupada como si no lo está. Así la posibilidad de aparición de humedades de condensación por falta de ventilación es nula, y para usuarios alérgicos, permite colocar filtros que aseguren un aire interior de alta calidad.